V Encuentro Memorias y Conclusiones

138 | Memorias y conclusiones del V Encuentro Nacional de Pastoral Hispana/Latina • ¡Los jóvenes hispanos están llenos de alegría, dones, talentos, habilidades, fuerza y ​creatividad! El poten- cial escondido de los jóvenes no debe ser subestimado. Debemos seguir afirmando e invocando este potencial en todos y cada uno de los jóvenes. • De las 176 diócesis territoriales de rito latino en EUA, solo 31 cuentan actualmente con personal respon- sable de la pastoral juvenil hispana. No hay datos completos sobre los líderes en las parroquias. • Los presupuestos parroquiales y diocesanos son un indicador de prioridades; hay que dedicarle recursos humanos a este ministerio en forma de personal pastoral de tiempo completo para servir a los jóvenes latinos, no solo voluntarios. • La súplica para una Iglesia más acogedora, honesta y abierta a personas de todas las culturas e idiomas resuena fuerte y claramente de parte de los jóvenes latinos en la consulta del V Encuentro. • Se necesitan más recursos de formación, como retiros, conferencias y talleres a nivel regional, diocesano y parroquial. III. Recomendaciones principales del Encuentro Nacional • Afianzar mayor formación y capacitación para líderes jóvenes hispanos/latinos. • Asignar más recursos financieros a la pastoral juvenil en todos los niveles eclesiales. • Involucrar a los jóvenes en las estructuras de liderazgo y toma de decisiones de la iglesia a todo nivel. IV. Prácticas exitosas y recomendadas • Priorizar a los jóvenes en la vida de sus parroquias. • Capacitar a líderes jóvenes hispanos/latinos para servir como protagonistas en este ministerio, acompañar a otros jóvenes y participar en los ministerios de la Iglesia. • Asignar fondos para la pastoral juvenil hispana. • Incrementar la comunicación entre líderes pastorales y los jóvenes. • Traer músicos, artistas y evangelizadores católicos latinos para motivar a los jóvenes hispanos/latinos en encuentros diocesanos y regionales. • Tender puentes con los movimientos eclesiales que tienen un carisma para responder a los jóvenes y apoyar su ministerio entre los jóvenes hispanos en la comunidad. • Desarrollar eventos o estructuras de retroalimentación para que el obispo escuche las preocupaciones y esperanzas de los jóvenes latinos en su diócesis. • Abrir las puertas para que los jóvenes hispanos se involucren en la comunidad, la parroquia y la diócesis. • Permitir que los jóvenes latinos identifiquen preocupaciones sociales de justicia y paz en la comunidad (p.ej. asuntos de vida, inmigración, problemas en el lugar de trabajo, crimen y violencia, etc.) y encargarlos de responder en nombre de la parroquia. • Enfocar la pastoral con y por los jóvenes hispanos/latinos en la evangelización y el discipulado misionero desde su propio entorno social con alcance a las periferias. Esto es lo más atractivo e inspirador para ellos. • Involucrar a jóvenes hispanos/latinos en esfuerzos intencionales para construir unidad en la diversidad, especialmente en parroquias multiculturales; en este sentido, pueden ser modelos a seguir para toda la comunidad parroquial. • Comunicar con claridad y coherencia la visión y misión de la pastoral juvenil hispana a los líderes de la Iglesia. Nunca cansarse de los esfuerzos de abogar a favor de esta parte del Cuerpo de Cristo, a menudo olvidada. Sesiones por Área Ministerial

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