V Encuentro Memorias y Conclusiones

Memorias y conclusiones del V Encuentro Nacional de Pastoral Hispana/Latina | 23 el alcance pastoral de la Iglesia, como lo explica el Santo Padre: “La comunidad evangelizadora se dispone a «acompa- ñar». Acompaña a la humanidad en todos sus procesos, por más duros y prolonga- dos que sean. Sabe de esperas largas y de aguante apostólico. La evangelización tiene mucho de paciencia, y evita maltra- tar límites”. ( EG 24) • Fructificar – Dando frutos de vida nueva. Fue al partir el pan que se abrieron los ojos de los discípulos para reconocer a Jesús en medio de ellos y, a pesar de la hora tardía, regresaron inmediatamente a Jerusalén. (Lc 24,29-33a) Para el discípulo misionero, existe una verdadera urgen- cia de compartir la Buena Nueva con los demás y trabajar para la transformación de realidades sociales injustas, como destaca el Papa Francisco: “Fiel al don del Señor, [la comunidad] también sabe «fructificar». La comunidad evangelizadora siempre está atenta a los frutos, porque el Señor la quiere fecunda. Cuida el trigo y no pierde la paz por la cizaña. El sembrador, cuando ve despuntar la cizaña en medio del trigo, no tiene reacciones quejosas ni alarmistas. Encuentra la manera de que la Palabra se encarne en una situación con- creta y dé frutos de vida nueva, aunque en apariencia sean imperfectos o inacaba- dos. El discípulo sabe dar la vida entera y jugarla hasta el martirio como testimonio de Jesucristo, pero su sueño no es llenarse de enemigos, sino que la Palabra sea aco- gida y manifieste su potencia liberadora y renovadora”. ( EG 24) • Festejar – Celebrando la alegría de ser discípulos misioneros. Los discípulos des- cribieron la alegría de su encuentro con el Señor como un ardor en sus corazo- nes que solo se fortalecía cuando com- partían la experiencia con los demás. (Lc 24,32-35) Para el Santo Padre, esta ale- gría encuentra su mayor expresión en la celebración comunal de la liturgia: “Por último, la comunidad evangelizadora gozosa siempre sabe «festejar». Celebra y festeja cada pequeña victoria, cada paso adelante en la evangelización. La evan- gelización gozosa se vuelve belleza en la liturgia en medio de la exigencia diaria de extender el bien. La Iglesia evangeliza y se evangeliza a sí misma con la belleza de la liturgia, la cual también es celebración de la actividad evangelizadora y fuente de un renovado impulso donativo”. ( EG 24) Para resumir, el proceso del V Encuentro fue una verdadera experiencia de sinodalidad y discipulado misionero, inspirada por un modelo de Iglesia en salida. El proceso de reflexión, evangelización, consulta y discerni- miento pastoral invitó a las comunidades de fe, escuelas, movimientos, organizaciones y grupos católicos en Estados Unidos a: A. Lanzarse a la vivencia de una Iglesia en salida. B. Participar en un proceso de reflexión y compartir la fe en un grupo pequeño. C. Profundizar sobre el llamado a ser discí- pulos misioneros. D. Entregarse a la acción misionera evange- lizadora y la consulta en las periferias. E. Recoger la experiencia del proceso de consulta y discernir sus implicaciones pastorales. F. Pasar de ser un grupo pequeño a una pequeña comunidad. V Encuentro como modelo y guía