V Encuentro Memorias y Conclusiones

Memorias y conclusiones del V Encuentro Nacional de Pastoral Hispana/Latina | 39 Encuentro en sí. La gente en general estaba entusiasmada con las visitas a las periferias. De hecho, muchos pidieron convertirlo en un ministerio permanente en la comunidad parroquial y encontrar formas de capacitar y enviar a ciertas personas a visitar de manera regular a los enfermos y a los que no pueden salir de casa. Sin embargo, estas visitas también identi- ficaron una serie de áreas donde el alcance pastoral de la Iglesia dentro de la comuni- dad hispana/latina ha sido deficiente a veces: acompañamiento de las parejas casadas y familias en los problemas que enfrentan; apoyo para los jóvenes en crisis y sus familias, incluyendo la atención y la sensibilidad para los jóvenes que se identifican como LGBTQ; acompañamiento a madres solteras así como las personas divorciadas o separadas; a per- sonas en riesgo o que sufren violencia, abuso de sustancias y pandillas; a los desempleados y aquellos que reciben salarios inferiores a los estándares; servicios de salud mental y con- sejería para personas deprimidas, afligidas o que padecen de enfermedades mentales... por mencionar tan solo algunas de las inquie- tudes más comunes. Algunos otros comentarios estaban rela- cionados con experiencias de rechazo o de párrocos y equipos pastorales mal prepara- dos. Algunos mencionaron que les dijeron que se fueran a otra parroquia porque habla- ban español; hablaron de las divisiones y el acceso desigual a los recursos e instalaciones en la parroquia; y especialmente de su frus- tración con los sacerdotes que no encuen- tran tiempo para estar con la comunidad hispana, para aprender el idioma y la cultura, o para proporcionar sustento espiritual en las devociones y celebraciones populares. Buscan una mayor apertura y colaboración con otras culturas e idiomas, y la voluntad de todos los líderes, independientemente de su cultura, de participar y aprender de otros grupos culturales. Algunos sintieron que las parroquias estaban más preocupadas por las reglas que por las personas, y les gustaría ver que los requisitos para la preparación sacra- mental fueran más fáciles de alcanzar. Adolescentes y jóvenes adultos. El acompa- ñamiento pastoral de los adolescentes y jóve- nes adultos hispanos/latinos también fue una preocupación común. Las personas visitadas expresaron con frecuencia la percepción de que los servicios existentes no atendían a la mayoría de los jóvenes hispanos, y de que los padres se angustiaban al ver que sus hijos abandonaban la fe —especialmente después de recibir la Confirmación— o escuchaban que su participación no era bienvenida en la Iglesia. Los jóvenes latinos que enfrentan grandes desafíos en la vida son los más aban- donados. A los padres de familia les gustaría ver más retiros, grupos, deportes y experien- cias misioneras en las que los jóvenes hispa- nos fueran los líderes. Obstáculos a la participación. En muchos casos, las voces de las periferias admitie- ron que la Iglesia no tenía toda la culpa. Reconocieron que con frecuencia los margi- nados solo pueden culparse a sí mismos, por- que no están motivados para participar en la vida de la parroquia. Sin embargo, aprecia- ron la visita y la preocupación expresada al escuchar sus respuestas. En algunos casos, solicitaron más misas en español o la dispo- nibilidad de sacerdotes y líderes pastorales que conozcan el idioma y la cultura. Entre los Ecos de los encuentros en las periferias

RkJQdWJsaXNoZXIy MTQyMjIw