V Encuentro Memorias y Conclusiones

48 | Memorias y conclusiones del V Encuentro Nacional de Pastoral Hispana/Latina El Evangelio de Mateo está lleno de ejemplos de la fidelidad de Dios a su compromiso de estar con nosotros, desde el anuncio del ángel del Señor hacia José (Mt 1,23) hasta la promesa de Jesús de estar con sus discípulos hasta el final del mundo (Mt 28,20). El mismo apóstol Mateo sufrió el desencanto y recibió aliento a través del llamado de Cristo a seguirlo. Esta invitación culmina con la participación de Mateo en la mesa de Cristo. Es solo en el Evangelio de Mateo que la palabra iglesia ( ekklesia ) se usa cuando Jesús le da las llaves de la autoridad a Simón Pedro y en la corrección fraterna de los discípulos. “El verdadero ánimo nos llega en la plenitud del Evangelio, porque ni el pecado ni la muerte tienen la última palabra. El verdadero aliento es que la última Palabra ha sido pronunciada por Dios Padre”. “Toda la Iglesia centrada en Cristo tiene que rendir cuentas en estos asuntos que afectan nuestra vida de comunión. Es una responsabilidad que es justa y misericordiosa”. Discurso principal: Con obras y gestos – Joseph Cardenal Tobin, C.Ss.R., Arzobispo de Newark El Cardenal Tobin describió los retos de una iglesia multicultural, vistos por la lente del milagro en Pentecostés. Para el Cardenal, este milagro proporciona dos facetas para comprender nues- tra situación actual. Lo primero y más importante es la multiplicidad de idiomas, ya que miles de personas escucharon la Buena Nueva en su propio idioma. La segunda faceta, que es más sutil que la primera, es la unidad que trasciende la cultura. Las mismas personas que escucha- ron la Buena Nueva en diferentes idiomas no dejaron atrás su identidad al seguir a Jesús. Más bien, la efusión del Espíritu Santo forjó a una comunidad unida, enriquecida por su diversidad. Esta relación con el Espíritu Santo suscita una pregunta crucial: ¿Dónde están las puertas que Dios está abriendo? El capítulo 16 de los Hechos de los Apóstoles ilustra la sensibilidad nece- saria para escuchar al Espíritu. Incluso en medio del fracaso, tales eventos desalentadores pue- den ser la obra del Espíritu que nos enseña a ir en otra dirección, así como san Pablo descubrió en sus propias limitaciones que Dios le estaba abriendo una puerta. Independientemente de circunstancias difíciles, la Iglesia no puede eludir su misión: el anunciar el Evangelio a todas las criaturas y llevar a todos a la luz de Cristo. En el capítulo 10 de Mateo, Jesús explica que cuando se trata del servicio misionero, la iniciativa debe ser lo primero, mientras que los recur- sos necesarios pronto lo seguirán. Este Encuentro es un espacio privilegiado para preguntar: ¿Cuáles son las puertas que Dios está abriendo para la Iglesia hoy? Será necesario revisar estructuras y estrategias. Debemos preguntar- nos si éstos son lo que requiere la misión en este momento y si son tan eficaces ahora como lo eran en el pasado. Debemos asegurarnos de que no pensamos y hablamos desde una Iglesia introspec- tiva, sino que tenemos nuestros ojos puestos en la misión y en lo que esto exige de nosotros. Involucrarse