V Encuentro Memorias y Conclusiones

Memorias y conclusiones del V Encuentro Nacional de Pastoral Hispana/Latina | 77 personas que no pueden salir de su hogar; dar la bienvenida y ayudar a los recién llega- dos a encontrar trabajo, educación y forma- ción en la fe, estén o no documentados; cen- trarse en alcanzar a los jóvenes, tomando en cuenta sus intereses y preferencias; ayudar a los padres de familia a transformar el hogar en iglesia doméstica, el ámbito de evange- lización por palabra y ejemplo, de donde se transmite la fe a la siguiente generación; y asegurar que en el núcleo de todo ministerio está el encuentro personal con Jesucristo. B. FORMACIÓN EN LA FE Y CATEQUESIS Los delegados reconocieron que los padres de familia hispanos/latinos tienen dificultades en la transmisión de la fe a sus hijos. Por eso, recomendaron que la Iglesia incluya a toda la familia en sus esfuerzos para la formación en la fe, no solo a los niños. Para algunos, eso significa tener clases para los padres mien- tras que los niños reciben instrucción. Otros sugirieron privilegiar o fortalecer un sistema de catequesis familiar. Otra sugerencia fue visitar a las familias y llevar a cabo sesiones catequéticas en la comunidad, en lugar, o además de tenerlas en las instalaciones de la parroquia. En cualquier caso, dijeron que la clave es fortalecer la formación de los padres de familia para que puedan ser más eficaces al asumir la responsabilidad de la formación en la fe de sus propios hijos. Otra recomendación común fue implementar programas de formación para catequistas y líderes laicos en cada ministerio. Con dema- siada frecuencia, su preparación se limita a lo que está en el libro, y los libros y recursos no presentan bien las preguntas sobre la fe y el contexto social y cultural de los hispanos/lati- nos. La formación de estos líderes debe ser continua y permanente, con un proceso cons- tante de aprendizaje sobre la realidad de las personas a las que están llamados a servir en la comunidad local. También es importante reclutar y formar más catequistas bilingües, ya sea que enseñen principalmente en inglés o español. Ser catequista es un llamado de Dios y exige un fuerte compromiso con la preparación personal, el estudio y el testimo- nio vivo de la fe, de palabra y de obra. Hay un serio problema en la catequesis hoy porque la enseñanza de la Iglesia no conecta con gran parte de las generaciones jóvenes. Se requieren técnicas más dinámicas para la catequesis, y esto significa que los catequis- tas deben esforzarse por mejorar su peda- gogía y elegir mejores recursos, y no solo centrarse en el contenido de la lección. Los editores de recursos catequéticos deben incluir estas metodologías en sus lecciones y ayudar a los líderes catequéticos diocesa- nos a incorporar capacitación en técnicas y estrategias de instrucción en su formación para catequistas. Los delegados pidieron un énfasis en el manejo de la biblia, tal vez por prácticas de lectio divina, así como asegu- rarse de que la catequesis esté siempre enrai- zada en el encuentro personal con Jesucristo. Además, los materiales deben ser bilingües y adaptados al contexto cultural y social de la comunidad hispana/latina. Los delegados reconocieron que resulta difí- cil encontrar maneras de superar la tenden- cia en la comunidad de centrarse solamente en la preparación sacramental. Las familias buscan la parroquia que ofrezca el camino más corto para el Bautismo, la Comunión, la Recomendaciones