¿Tendrá que pagar por los abortos en su plan de salud? (In English)

Richard M. Doerflinger

13 de septiembre de 2013

El tema confunde a cualquiera. Algunos defensores de la nueva ley de cuidados de salud llamada Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA, sigla en inglés) dicen que no se destinarán fondos de los contribuyentes para pagar abortos. Sin embargo escuchamos que los estadounidenses que compran un plan de salud en los "intercambios" que se están implementando ahora en la mayoría de los estados deben pagar un recargo mensual para cubrir abortos optativos. ¿Cuáles son los hechos?

Ante todo, la buena noticia. Veintitrés estados han aprobado leyes que excluyen la mayoría de los abortos de todos los planes de sus intercambios de seguros de salud. En estos estados, los ciudadanos podrán elegir entre una amplia gama de planes de salud sin abortos quirúrgicos. (Trágicamente, incluso estos planes están alcanzados por el "mandato de los anticonceptivos" impuesto por el gobierno, el cual incluye algunas drogas, como Ella [ulipristal], que pueden provocar un aborto al comienzo de un embarazo. El mandato sigue siendo debatido en el Congreso y en tribunales). Incluso en los demás estados, ACA exige que al menos un plan excluya la mayoría de los abortos; otros planes pueden excluirlos, si la aseguradora así lo desea.

La mala noticia: la mayoría de las aseguradoras seculares probablemente cubrirán los abortos optativos (excepto que la ley estatal lo prohíba), como sucedía antes de que se aprobara ACA, ya que consideran que un aborto es más barato que un parto (y mucho más barato que familiares vivos a cargo, quienes pueden necesitar cuidados médicos al crecer). ACA empeora esta situación de cuatro maneras.

En primer lugar, los planes de salud que cubren abortos a pedido recibirán subsidios al impuesto federal si los ingresos del asegurado cumplen los requisitos. Por lo tanto, violando la política de todos los demás programas de salud federales, el dinero de sus impuestos se usará para subsidiar planes que cubren el aborto.

En segundo lugar, si cuenta con un plan que incluye el aborto, se le pedirá que pague un recargo por los abortos de otra gente. El monto comenzará en un mínimo de $1 por mes y aumentará cuando sea necesario. El Congreso "separó" este recargo para poder decir que no se destinan fondos de los contribuyentes a pagar los abortos. Sin embargo, la ley les prohíbe a las aseguradoras que contemplen la exclusión voluntaria de los asegurados.

En tercer lugar, ACA prohíbe a la aseguradora advertir de manera explícita a los asegurados que su plan cubre los abortos. Esta información solo puede aparecer en letra pequeña junto con todos los demás "servicios".

En cuarto lugar, ACA prohíbe a la aseguradora que le diga al asegurado cuánto paga por los abortos. Debe cobrarle el monto total de su cobertura (aborto y todo lo demás) y más tarde dividir los fondos en cuentas separadas. Esto busca evitar que usted se niegue a extender un cheque por los abortos.

En resumen, habrá subsidios impositivos para los planes de salud que cubren el aborto y muchos estadounidenses estarán obligados por ley a pagar primas por abortos. A pesar de afirmar que "no se financiarán abortos con el dinero de los contribuyentes", ACA amplía el apoyo federal del aborto y restringe la libertad de quienes se niegan a pagarlo.

Por lo tanto, si usted no cuenta con un plan de salud laboral u otro plan grupal y debe elegir un plan individual en el intercambio de seguros de salud de su estado, ¿qué puede hacer? Puede averiguar si vive en alguno de los 23 estados. Si no es así, puede encontrar el único plan en su estado que no cubre abortos optativos y buscar planes que eligen no cubrirlos. (Las organizaciones católicas y otras organizaciones pro vida pueden ayudarlo con su búsqueda). Puede instar a los legisladores estatales y federales a enmendar esta situación, de modo que los cuidados de salud para todos realmente se conviertan en una medida en defensa de la vida, como los católicos y muchos otros esperaban. Y podemos rezar para que Dios ilumine a los funcionarios y las aseguradoras de modo que comprendan la diferencia entre curar y matar.


El señor Doerflinger es subdirector del Secretariado de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos. Para más información sobre las actividades pro vida de los obispos, visite www.usccb.org/prolife; para escribir al Congreso sobre los derechos de conciencia en los cuidados de salud, visite www.nchla.org.