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Reza para que los rohingyás, nuestros hermanos y hermanas musulmanes de la región de Rakhine, cuyos derechos e identidad no son reconocidos por el gobierno de Myanmar, puedan encontrar el respeto que reconoce la dignidad de todos los seres humanos.
Reflexiona
Desde 2017, más de 700,000 rohingyás huyeron de Myanmar cuando sus aldeas fueron incendiadas, mujeres violadas y hombres asesinados en lo que un funcionario de las Naciones Unidas ha denominado "genocidio". Muchos refugiados están en campos en Bangladesh, mientras que otros se hacinan en barcos endebles rumbo a Tailandia, Malasia e Indonesia, donde su destino es incierto. Se les presiona para que regresen, pero ¿qué garantías hay de que serán tratados con dignidad y como miembros iguales de la sociedad por un gobierno que los ha declarado "apátridas"? La Iglesia Católica ha estado muy activa en la promoción del diálogo entre la mayoría budista y los rohingyás. El Papa Francisco visitó Myanmar y Bangladesh a finales de 2017. En una reunión interreligiosa y ecuménica en Dhaka, el Papa dijo: "Queridos hermanos y hermanas, todos estamos cerca de vosotros. Es poco lo que podemos hacer porque vuestra tragedia es muy grande”. Y porque todos somos imagen de Dios,... continuó diciendo el Santo Padre: “Todos nosotros somos esta imagen. También estos hermanos y hermanas.… La presencia de Dios, hoy, también se llama “rohinyá”.
Acción
Acércate a tus vecinos musulmantes y miembros de tu comunidad para expresar tu solidaridad con los esfuerzos de ellos para construir una cultura que reconozca y respete el derecho de todas las personas. Apoyen a Catholic Relief Services y a otras organizaciones católicas que buscan edificar puentes de comprensión entre diferentes comunidades de fe y a luchar contra la intolerancia y el extremismo.