Capítulo 32. El Octavo Mandamiento: Di la Verdad
• 463
LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
En nuestra cultura, los medios de comunicación gozan de una posición
muy influyente a la hora de diseminar información, formar actitudes
y motivar comportamientos. Los avances tecnológicos están incremen
tando la función de los medios de comunicación y de su capacidad
de formar la opinión pública. “La información de estos medios es un
servicio del bien común (cf.
Inter Mirifica
, no. 11). La sociedad tiene
derecho a una información fundada en la verdad, la libertad, la justicia
y la solidaridad” (CIC, no. 2494). En la recopilación y publicación de
noticias, la ley moral y los derechos legítimos y la dignidad humana de
todos deberían ser respetados.
La mentira está relacionada con el drama del pecado y
sus consecuencias perversas, que han causado y siguen
causando efectos devastadores en la vida de los individuos
y de las naciones. Baste pensar en todo lo que ha sucedido
en el siglo pasado, cuando sistemas ideológicos y políti
cos aberrantes han tergiversado de manera programada
la verdad y han llevado a la explotación y al exterminio
de un número impresionante de hombres y mujeres, e
incluso de familias y comunidades enteras. Después de
tales experiencias, ¿cómo no preocuparse seriamente ante
las mentiras de nuestro tiempo, que son como el telón de
fondo de escenarios amenazadores de muerte en diversas
regiones del mundo? La auténtica búsqueda de la paz
requiere tomar conciencia de que el problema de la verdad
y la mentira concierne a cada hombre y a cada mujer, y
que es decisivo para un futuro pacífico de nuestro planeta.
(Benedicto XVI, “Mensaje para la Jornada Mundial de la
Paz”, 1 de enero de 2006)
LAS MENTIRAS CAUSAN EFECTOS DEVASTADORES